I. EL OZONO TROPOSFÉRICO
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El ozono
Otro problema del ozono, es que no solo afecta a nivel local donde se genera, si
no que también lo hace a decenas, cientos o incluso miles de kilómetros del lugar de
su generación. Por ejemplo, el ozono generado en Madrid Capital se acumula en la
Sierra Norte (además del local), donde los niveles pueden ser muy elevados (en El
Atazar o Algete, durante el mes de julio de 2013, se anotaron 23 días en los que los
niveles de ozono se situaron por encima de los recomendables para la salud) (14).
Y es que en un día de circulación atmosférica del oeste o noroeste, que es la
mas habitual en Madrid, la contaminación atmosférica generada por la mañana en la
zona oeste de la capital, se traslada a través del Parque del Oeste hasta llegar por la
tarde a la Plaza de Castilla (noroeste), y desde allí por acción de los vientos
dominantes se va acumulando en la Sierra Norte (noreste fundamentalmente); de ahí
los altos valores registrados en las zonas indicadas anteriormente (situadas al noreste
de Madrid Capital).
La contaminación por ozono no es de momento preocupante en Madrid Capital.
Las medidas realizadas en verano (más de 200.000), que es la peor época para la
contaminación por ozono, arrojan valores medios de 30 a 42 μg/m
3
, resultando
generalmente el mejor mes septiembre, y el peor agosto (debido al menor tráfico,
como después veremos), muy por debajo del nivel de alerta, incluso del objetivo
establecido por la Directiva 92/72, sobre contaminación por ozono (240 μg/m
3
).
Aunque si es cierto que ocurren episodios concretos en Madrid Capital, como
es el caso del verano del 2000, en el que solamente en dos ocasiones, de las 33.000
