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mejoría en la esperanza de vida, y sobre todo, en la calidad de vida de determinados
pacientes, con incidencia en Salud Pública por la prevención de la enfermedad y le
consiguiente ahorro sanitario.
La práctica clínica en atención primaria debe ligarse y entroncarse con el investigador
en ciencia aplicada básica o fundamental, así avanzar conjuntamente en la investigación
biomédica cada vez más ligada a la biotecnológica y bioinformática, para mejorar el
tratamiento en beneficio del paciente y en la curación de la enfermedad.
La obesidad es un Síndrome típico para aplicar la “Investigación Traslacional” que es
la conjunción del médico clínico y de atención primaria, con el investigador clínico y
básico fundamental. De las investigaciones básicas orientadas al paciente pueden surgir con
mayor facilidad nuevas hipótesis, tanto de su compleja etiología, como en la identificación
de nuevas moléculas implicadas en el desequilibrio homeostático del paciente obeso, con el
objetivo de su curación.
Actualmente numerosas moléculas y principios activos, más de veinte, están
contemplados en las fases clínicas de desarrollo experimental I a IV, en espera de su
aplicación en el tratamiento de la obesidad, lo que despierta una verdadera esperanza en el
avance del conocimiento del trastorno obeso.
En la actualidad, y hasta que no se conozca la causa del trastorno en cada paciente
obeso, es de desear, la administración conjunta de varias moléculas, como en el caso de la
quimioterapia para el cáncer; y en la obesidad con efedrina-cafeína ya superado, o bien de
topiramato-fentermina, y topiramato-zonisamida, porque inducen a sinergismo,
potenciando su efecto clínico beneficioso en los pacientes.
Algunos pacientes tratados con fármacos han llegado a perder alrededor del 10% de su
peso previo al tratamiento. La máxima pérdida de peso suele alcanzarse en los primeros 6
meses después de iniciar la medicación. El peso suele mantenerse o incluso aumentar
durante el resto del tratamiento o al suspenderse.
Como enfermedad multicausal o Síndrome, la obesidad precisa de un tratamiento para
toda la vida, donde los fármacos son solo una parte del tratamiento que debe
complementarse con una alimentación saludable y ejercicio o actividad física habitual.