Biodeterioro de monumentos y biorremediación…
565
estrategias preventivas. Más drástica es la utilización de biocidas, no siempre
recomendada (14, 15), y cuyo empleo está determinado por la propia naturaleza
del monumento u obra de arte a conservar.
En los últimos años se han estudiado una serie de casos de biodeterioro en
distintos monumentos que aportaron, junto al diagnóstico del proceso, medidas de
conservación (3, 16, 17). Uno de los casos más frecuentes en cuevas visitables es la
colonización de cianobacterias y algas, que suelen desarrollarse en el suelo, las
estalactitas y estalagmitas, y en las paredes en aquellos lugares donde existen
puntos de iluminación para la visita turística, como la cueva Tito Bustillo, en
Ribadesella (18) o la cueva del Tesoro, en el Rincón de la Victoria (Figura 1). En
posteriores visitas a estas cuevas se observó que la eliminación de algunos de estos
focos condujo a la desaparición de la comunidad fotosintética. Sin embargo, el
aporte de materia orgánica proporcionada por los polisacáridos extracelulares de
las cianobacterias puede dar lugar a la proliferación de comunidades de bacterias y
hongos, capaces de utilizarlos como fuente de carbono, si no se eliminan
adecuadamente (19). Recientemente se ha efectuado un estudio sobre la
eliminación de microorganismos fotosintéticos en cuevas catalanas combinando
biocidas y modificando el sistema de iluminación (20).
Figura 1.-‐
Crecimiento de cianobacterias y algas sobre las paredes de la Cueva del Tesoro, Rincón
de la Victoria, Málaga, debido a la iluminación.
En España se han estudiado las comunidades microbianas de las pinturas